Hola, buenos días, hoy Lety nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Llevamos unos días con un viento muy fuerte, que mueve mucho los árboles. Cuando paseas, ves las nueces en el suelo, las hojas caídas, las ramas quebradas…
Hola, buenos días, hoy Sión nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
El horario del monasterio cambia completamente durante el mes de octubre por ser el mes del rosario. Esta modificación hace que las tardes sean muy cortas, y, si empiezas una tarea un poco intensa, lo más probable es que te quedes a medias.
Hola, buenos días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Imagino que también te pasa en casa: hay alguna silla o banqueta que, en lugar de servir para sentarse, se convierte en un “punto de apoyo” donde dejar las cosas. No me di cuenta de lo importante que era esto hasta ayer, cuando quise dejar la ropa en una banqueta y… no estaba en su lugar. No tuve más remedio que dejarla en el suelo.
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Como cada mañana al levantarme, abro la ventana para ventilar y me asomo durante unos segundos. Me gusta contemplar, durante ese instante, aún en la oscuridad, aquello que el Señor me regala. Hoy descubrí que estaba lloviendo. Qué gozada escuchar la lluvia golpeando sobre lo que nos rodea.
Hola, buenos días, hoy Sión nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Estaba en el Noviciado cuando, de pronto, a la puerta de mi celda, ¡apareció el gato!
