COMENZAMOS
“¿Qué horario tenéis?” Cada vez que vienen jóvenes nos lo preguntan... les hablamos de las cinco horas y media de oración, del trabajo, del estudio... y de ¡la hora a que nos levantamos! Como somos conscientes de que una cosa es contarlo y otra vivirlo, las jornadas son una oportunidad de vivir nuestro horario de principio a fin.