El AMOR NO PASA NUNCA

IV siglos de presencia dominicana en Lerma.
Han transcurrido ya 400 años de la llegada de las primeras monjas dominicas a la villa de Lerma (Burgos, España). Habían dejado atrás su querido monasterio del Tovar, en la lejana Guadalajara, aunque su historia había comenzado mucho antes.
Lerma, Cifuentes, Caleruega: infantes, reyes, duques… Descubre la bella trama escrita por la Providencia para esta comunidad de dominicas que con su vida testimonian que Cristo puede llenar una vida ayer, hoy y siempre, porque “el Amor no pasa nunca”.