El reto de hoy es que vayas a un santuario de la Virgen
Buenos días, hoy sor María Jesús nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
He recibido un mensaje de una buena amiga con la que compartimos la fe y el camino del Señor.
Me decía que el domingo iban a aprovechar para ir en familia a un santuario de la Virgen María y así ofrecer el nuevo curso y la etapa posterior a las vacaciones recién acabadas a María, nuestra Madre.
Me ha encantado esta iniciativa que el Espíritu Santo ha inspirado a esta familia.
¡Qué hermoso es poner nuestra vida, actividades, previsiones, salud… todo al cuidado y protección de María!
Tantas veces hacemos planes: nos apuntamos a cursillos, gimnasios, manualidades… como una buena idea para aprender y mejorar nuestra salud o estatus, a veces solo por socializar u ocupar el tiempo.
Sin embargo, olvidamos que si todo lo que hacemos lo presentamos al Señor por medio de su Madre, va a aportarnos una paz y un gozo muy superiores. Porque no vamos solos: vamos acompañados.
Recuerdo que de pequeña, los primeros días, nuestra madre nos acompañaba al colegio.
Como pasábamos enfrente de una ermita, íbamos rezando al Cristo. Así el camino, que era un poco largo, se hacía ameno y se nos olvidaba que habían terminado las vacaciones y empezábamos el cole otra vez.
Este curso también nuestra Madre quiere acompañarnos en todo y vivir cada acontecimiento con nosotros.
Quiere hacernos corto el trayecto pesado y ameno el camino diario… ¡¡¡es nuestra amiga!!!
El reto de hoy es que vayas a un santuario de la Virgen, ante una imagen que tengas en tu ciudad, a una ermita…
En Lerma tenemos la Virgen de Manciles, la ermita de la Piedad o la Virgen del Rosario.
También nosotras tenemos en la huerta dos capillas dedicadas a la Virgen.
Presenta a María este curso, tus planes, para que ella los presente al Señor.
Empieza el curso de la mano de tu MADRE.
VIVE DE CRISTO
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¡Feliz día!
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