8 DE SEPTIEMBRE - NATIVIDAD DE NUESTRA SEÑORA

FIESTA - CICLO A, B, C

 

              Esta fiesta mariana tiene su origen en la dedicación de una iglesia en Jerusalén. La piedad cristiana

                     siempre ha venerado a las personas y acontecimientos que han preparado el nacimiento de Jesús.

                     María ocupa un lugar privilegiado y su nacimiento es motivo de gozo profundo.

 

Miq. 5, 1-4a

1 Mas tú, Belén Efratá, aunque eres la menor entre las familias de Judá, de ti me ha de salir aquel que ha de dominar en Israel, y cuyos orígenes son de antigüedad, desde los días de antaño.

2 Por eso él los abandonará hasta el tiempo en que dé a luz la que ha de dar a luz. Entonces el resto de sus hermanos volverá a los hijos de Israel.

3 El se alzará y pastoreará con el poder de Yahveh, con la majestad del nombre de Yahveh su Dios. Se asentarán bien, porque entonces se hará él grande hasta los confines de la tierra.

4 El será la Paz.

     (v. 1)      -    Parece querar dar aquí Miq. con “Efratá el sentido etimológico de “fecunda en relación con el nacimiento del Mesías. Efratá designaba:

1º)   un clan aliado de Caleb (I Cro. 2, 19, 24, 50) y establecido en la región de Belén (Is. 17,

         12; Rt. 1, 2).

2º)    Luego el nombre pasó a la ciudad (Gn. 35, 19; 48, 7) (Jos. 15, 59; Rt. 4, 11) y de ahí la glosa del texto. Miq. está pensando en los antiguos orígenes de la dinastía de David.

3º)    Los evangelistas reconocerán en “Belén de Efratá la designación del lugar del nacimiento del Mesías.

-   El origen de la dinastía del Mesías es “de antigüedaddesde los días de antaño.

(v. 2)       -   Jahvé los abandonará hasta que la Madre del Mesías de a luz. Miq. piensa tal vez en el célebre oráculo de la “ALMAH de (Is. 7, 14) que pronunció Isaías 30 años antes.

(v. 3)       -   Este “salvador hará retornar a los hijos dispersos a Israel y tendrá la misma fuerza de Jahvé para pastorearlos y con la misma majestad del nombre de Jahvé les regirá. Su trono “se asentará bien, es decir, será perpetuo y su nombre grande entre todos los grandes y en todos los confines de la tierra.

(v. 4)       -   “El será la Paz anuncia este oráculo una victoria futura sobre Asur, atribuyéndola al hijo de David (v. 5b) y a los jefes de Judá (v. 4b) (Jc. 6, 24).

Rm. 8, 28-30

28 Por lo demás, sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que le aman; de aquellos que han sido llamados según su designio.

29 Pues a los que de antemano conoció, también los predestinó a reproducir la imagen de su Hijo, para que fuera él  el primogenito entre muchos hermanos;

30 y a los que predestinó, a ésos también los justificó; a los que justificó, a ésos también los glorificó.

(v. 28)      -Lo sabemos porque nuestra esperanza no defrauda, pues está puesta en Dios y ella nos permite soportar con paciencialos sufrimientos del tiempo presente” (v. 18), pues todo concurre para el bien nuestro. Esto no significa que los sufrimientos no sean tales para el cristiano o más llevaderos, no, la diferencia es que éste, a diferencia del pagano, soporta con esperanza.

                      -   El amar a Dios no es mérito nuestro. Le amamos porque primero hemos sido amados por El y esto se explaya en los versículos siguientes (5, 5) (8, 26). Los que aman a Dios son los mismos que Él ha llamado en su voluntad salvífica: esta es nuestra vocación.

(v. 29-30) -   1)  Nos conoce con Amor, en la eternidad.

                           2)  Nos hace conformes a la imagen de su Hijo en la historia, es decir, en el tiempo.

                           3)  Nos llama, con una vocación salvífica en la historia.

                           4)  Nos justifica, es decir, nos hace santos también en el tiempo.

                           5)  Nos glorifica ya en la eternidad. Pues por la fe somos exaltados (3, 27.28; 5, 1)

                      -   Este bien futuro de la gloria de Dios se les comunica ya ahora a los creyentes, inicialmente, juntocon las primicias del Espíritu (v. 23). Y esa gloria no es otra que el don del Hijo de Dios (v. 32) (Leer Biblia de Jerusalén, Nota al v. 29).

        

(Mt.1,1-16. 18-23)

1 Libro de la generación de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham:

2 Abraham engendró a Isaac, Isaac engendró a Jacob, Jacob engendró a Judá y a sus hermanos,

3 Judá engendró, de Tamar, a Fares y a Zara, Fares engendró a Esrom, Esrom engendró a Aram,

4 Aram engendró a Aminadab, Aminadab engendró a Naassón, Naassón engendró a Salmón,

5 Salmón engendró, de Rajab, a Booz, Booz engendró, de Rut, a Obed, Obed engendró a Jesé,

6 Jesé engendró al rey David. David engendró, de la que fue mujer de Urías, a Salomón,

7 Salomón engendró a Roboam, Roboam engendró a Abiá, Abiá engendró a Asaf,

8 Asaf engendró a Josafat, Josafat engendró a Joram, Joram engendró a Ozías,

9 Ozías engendró a Joatam, Joatam engendró a Acaz, Acaz engendró a Ezequías,

10 Ezequías engendró a Manasés, Manasés engendró a Amón, Amón engendró a Josías,

11 Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando la deportación a Babilonia.

12 Después de la deportación a Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel engendró a Zorobabel,

13 Zorobabel engendró a Abiud, Abiud engendró a Eliakim, Eliakim engendró a Azor,

14 Azor engendró a Sadoq, Sadoq engendró a Aquim, Aquim engendró a Eliud,

15 Eliud engendró a Eleazar, Eleazar engendró a Mattán, Mattán engendró a Jacob,

16 y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la que nació Jesús, llamado Cristo.

18 La generación de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar  a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo.

19 Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto.

20 Así lo tenía planeado, cuando el Angel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: « José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo.

21 Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. »

22 Todo esto sucedió para que se cumpliese el oráculo del Señor por medio del profeta:

23 Ved que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel, que traducido significa: « Dios con nosotros. »

 

(v.1-16)      -    Mediante un milagro único en su género, tuvo lugar la concepción y el nacimiento de Jesús. Pero este no careció de los vínculos naturales de la familia y del pueblo. No fue sólo un enviado por Dios a nuestra historia y a nuestro mundo. Por medio de José, que es su padre en la ley, Jesús entra en la sucesión de las generaciones y esto atestigua que fue verdadero hombre, “nacido de mujer” (Gal.4,4). Pero la familia en la que aparece, es una familia regia, la familia de David, en la que ha de cumplirse la promesa mesiánica: 

                        a) el primer apelativo de Cristo es: “hijo de David” (2Sam.7, 1-16; Lc.1, 32). (Rm1, 3). Por otra parte, si no se hubiese podido demostrar el origen davídico de Jesús, se les habría dificultado mucho a los judíos la fe en que este Jesús era el Mesías.

                        b) La segunda aposición va más lejos todavía: “hijo de Abraham”, que es el fundador de todo un pueblo, no solamente de una estirpe. A Abraham se le hizo sobre todo la promesa  todavía más antigua y más amplia (Gen.12, 3). Él y sus descendientes debe ser fuente de bendición para todo el género humano. Don valioso que transmiten, hasta que la bendición se pose en el único vástago del linaje que trae la bendición para todo el mundo: (Gal.3, 16). El arco de la historia se extiende desde el patriarca de Israel hasta el fundador de un nuevo Israel.

                   -   En la genealogía de Mateo no es perfecto el árbol porque faltan muchos miembros intermedios. Las dos primeras secciones, hasta  la cautividad de Babilonia, podrían estar tomadas de los textos bíblicos (2, 6; l Cro. 2, 1-15; Rut 4, 18-22; 7-12; l Cro 3,5-16). Se desconocen las fuentes de la tercera sección. Jesús era el hijo de José según la ley y José era descendiente de David.

                    -     Mateo da importancia, no tanto a la exactitud científica como a la disposición y a la lógica internas (v. 17): siempre son 14 generaciones las que llenan los tres lapsos de tiempos entre Abraham, David, el cautiverio de Babilonia y Cristo. 14 es el doble de 7, número sagrado. En estos números se revela algo de la ordenación del plan de Dios en la historia. El nacimiento de Jesús es una parte de los planes divinos, la sabiduría con la que Dios conduce la historia.

                     -    Se menciona, en la genealogía a cuatro mujeres, siendo así que sólo se tiene en cuenta la línea masculina. Y estas mujeres, no son ilustres y célebres, sino personajes que permanecen en la sombra: Tamar (v3) que con insolente astucia consigue el derecho de descendencia (Gen 38,1-30); Rahab (v.5), prostituta cananea, que prestó ayuda al pueblo elegido (Jos2; 6,15ss); Rut que era gentil y fue bisabuela de David (Rt4, 12ss); “la mujer de Urías”, extranjera y esposa de un heteo. David cometió con ella adulterio (llSam11ss). A pesar de su sangre extranjera o de su indignidad, se lleva a término el plan de Dios, nada puede romper la bendición. Todos los rodeos fueron aprovechados para que del pueblo “viniera la descendencia a la que se hizo la promesa” (Gal3, 19). El camino de Dios es con frecuencia el rodeo, pero no por ello decae su fidelidad. Su voluntad salvadora, siempre se abre paso y es muy distinto del camino de los hombres. El de Dios, está lleno de misterios y sólo se accede a él por la confianza absoluta en su misericordia.

                     -    En los últimos versículos se habla por dos veces del Mesías: “llamado Cristo” y ”hasta Cristo catorce” generaciones. Se quiere demostrar la verdadera mesianidad de Jesús. El reúne en sí todas las promesas, no sólo las davídicas sino también las dirigidas a todo un pueblo consagrado a Dios. El concepto de Mesías, es mayor que el de la sucesión real. Aquí se trata de la vocación de Israel, de la bendición o maldición para todo el mundo: es un plan inteligente y prometedor de Dios.

                     -    La novedad de Lucas en su genealogía (3,23-38) es que la sucesión es invertida y sobrepasa el límite de Abrahán y llega hasta Adán, así, ve a Jesús como fundador no sólo del nuevo pueblo, sino también de una nueva humanidad.

(v. 18)   -    Es un relato conciso y sobrio del nacimiento del Mesías si lo comparamos con la narración de Lucas tan rica en detalles. S. Mateo supone al relatarlo que conocemos los pormenores de la concepción milagrosa y del nacimiento. Mateo quiere presentarnos en primer lugar a José como el final del árbol genealógico:esposo de María, es decir, según el decreto judío era considerada como legítima esposa, aunque aún no había José introducido en casa a su desposada. Y María estaba encinta por obra del Esp. Santo, pero Mateo anota que José no lo sabía, pues decide, al verla en esta estado, repudiarla en secreto. Nada nos dice de la turbación, de la pesadumbre, de las cavilaciones, de las dudas y titubeos del esposo. Sólo sabemos el resultado: decide separarse con gran sosiego.

(v. 19)   -    Dice queJosé era justo”. “Justo en la Biblia es el hombre que busca a Dios y que sujeta su vida a la voluntad de Dios, como el devoto del salmo 118; pero también es justo el hombre prudente y bondadoso. Es el hombre en quien Dios se complace.

(v. 20)   -    Y cuando ha tomado la decisión Dios interviene.José hijo de David (fuera de este caso sólo a Jesús se le concede este título honorífico). Se le introduce en el contexto de la historia divina, es uno de sushijos.

                     -    José con sencillez y docilidad procede como le había encargado el ángel: no debe temer llevar a María a su casa, pues lo obrado en ella es un milagro de Dios.

                     -    Con respeto y delicadeza se indica el misterio, son cosas divinas que no deben ser profanadas  por la curiosidad del hombre o por el lenguaje. Solo se nombra que es “obra del Esp. Santo.  Es el mismo Espíritu que llena a los profetas y a los héroes, pero también el que obra en el silencio y actúa ocultamente. La Virgen es un vaso de elección expuesto al soplo del Espíritu de Dios.

(v. 21)   -    Ahora el mensajero habla claramente: dará a luz y se le pondrá el nombre de Jesús. El otorgar el nombre era privilegio paterno, pero José además de no intervenir en la procreación, tampoco le da nombre.

                     -    Jesús = Salvador. Otros a través de la Biblia han llevado este nombre: Josué: Jesús Sirac o Eclesiástico (Eclo 50, 29); también un sumo sacerdote que después de la cautividad intervino en la restauración del culto (Esd. 2-5). Todos ellos fueron medianeros de alguna manera de la salvación de Dios. Pero en Jesús esta salvación va más allá: salvará a su pueblo de sus pecados,su pueblo no es el judío solamente sino el nuevo pueblo de Dios en donde Jesús ostentará el poderío.

(v. 22-23)- Mateo concluye las palabras del ángel indicando el cumplimiento de una profecía. El hecho del nacimiento de este niño es significativo 1) para el tiempo presente: tiene lugar el milagro del Esp. Santo; 2) para el tiempo futuro en que este niño llevará a cabo la liberación de su pueblo, y 3) y para el pasado que aparece con una nueva luz. Ahora las palabras de Isaías contienen un mensaje de alegría, no cuando fueron pronunciadas a Acaz. El nacimiento virginal del Mesías ya estaba indicado en el A.T. y el segundo dato deDios con nosotros es un nombre tan rico como el de Jesús. (Is. 43, 1s) Dios siempre estuvo con su pueblo, cerca de su pueblo en todo acontecimiento, pero se le prometía una cercanía totalmente nueva y distinta: Dios está presente en una persona humana, más próximo y activo que hasta entonces.

Imprimir

ImagenCookies

Hola! ¡Bienvenido a la página web del monasterio de san Blas! Nos encanta verte por aquí y esperamos que este sitio sea un lugar donde puedas encontrarte con Jesucristo Resucitado. Tan sólo queremos pedirte un favor: para mejorar la página y facilitar tu navegación por ella necesitamos que aceptes nuestras cookies. ¡Muchas gracias y oramos por ti!